La bronquitis es la inflamación de los conductos respiratorios mayores llamados bronquios, que genera un aumento de la producción de moco y otros cambios. Los bronquios conectan la tráquea con los pulmones. Aunque existen varios tipos diferentes de bronquitis, los dos más comunes son la bronquitis aguda y la bronquitis crónica.
La mayoría de los casos son generados por virus y son muchos los que pueden infectar las vías respiratorias y atacar los bronquios. También puede ser causada por agentes químicos o físicos como: el polvo, los vapores fuertes, el humo de tabaco, los vapores que provienen de algunos insumos de limpieza.
En los niños, la causa más común de bronquitis es un virus, aunque puede originarse por bacterias. La bronquitis aguda es generalmente un trastorno leve. Cuando la causa un virus, que es la mayoría de las veces, los antibióticos no sirven.
Puede aparecer luego de un resfrío común u otras infecciones virales en el tracto respiratorio alto. También puede presentarse en niños con sinusitis crónica, alergias y adenopatías. La neumonía es una complicación que puede presentarse después de la bronquitis.
Puede ser leve o grave y normalmente dura más tiempo que la bronquitis aguda. Este tipo de bronquitis es muy poco frecuente en los niños. La causa más común de este tipo de bronquitis es la conducta de fumar.
En las primeras etapas, los niños pueden experimentar una tos seca e improductiva que luego se transforma en una tos con abundante flema. Los niños más pequeños pueden experimentar vómitos o náuseas junto con la tos. Los síntomas de la bronquitis duran generalmente de 7 a 14 días, aunque pueden persistir de tres a cuatro semanas. Estos síntomas pueden confundirse con los de otros trastornos o problemas de salud; por eso lo recomendable es consultar de inmediato al médico.
Se diagnostica a través de un chequeo físico realizado por el médico tratante, preferiblemente pediatra; quien revisa los antecedentes médicos del niño o niña. Para confirmar el diagnostico, normalmente se ordenan otro tipo de exámenes, como:
El médico tratante es el indicado de enviar el tratamiento que se ajuste a las condiciones médicas del niño. Normalmente el tratamiento está acompañado de aumento de ingesta de líquidos y reposo.
Te recomendamos consultar a los especialistas de nuestra institución en caso de que tengas una sospecha de bronquitis en casa.
Fuente:
Kids Health
Children´s Health