La neumonía es un tipo de infección respiratoria aguda que afecta a los pulmones. Estos están formados por pequeños sacos, llamados alvéolos, que se llenan de aire al respirar. Cuando se tiene Neumonía estos alvéolos se llenan de pus y líquido, lo que genera que la respiración sea dolorosa, además de que limita la absorción de oxígeno. La neumonía puede ser causada por una infección de pulmón que puede causarse por múltiples microorganismos, como: bacterias, virus y hongos.
La neumonía puede propagarse por diversas vías. Los virus y bacterias presentes comúnmente en la nariz o garganta de los niños, pueden infectar los pulmones al inhalarse. También pueden propagarse por vía aérea, Además, la neumonía puede propagarse por medio de la sangre, sobre todo en el parto y en el periodo inmediatamente posterior.
Las neumonías bacterianas y víricas son más frecuentes que las neumonías por microbacterias.
La mayoría de los niños sanos pueden combatir la infección mediante sus defensas naturales, pero los niños inmunodeprimidos presentan un mayor riesgo de contraer neumonía. El sistema inmunitario del niño puede debilitarse por malnutrición o desnutrición, sobre todo en lactantes no alimentados exclusivamente con leche materna.
La presencia previa de enfermedades como sarampión o infecciones por VIH asintomáticas también aumentan el riesgo de que un niño contraiga neumonía.
Los siguientes factores ambientales pueden aumentar la susceptibilidad de los niños a la neumonía:
a. Bacterias
Las bacterias son una causa habitual de neumonía en los adultos. Muchos tipos de bacterias causan neumonía, pero la bacteria del neumococo es la causa más habitual.
Algunas bacterias causan neumonía con síntomas diferentes o con otras características que no son los de la neumonía habitual. Esa infección se llama neumonía atípica. La neumonía bacteriana puede desarrollarse sola o después de haber tenido un resfrío o una gripe.
b. Virus
Hay virus que infectan a los pulmones y las vías respiratorias y pueden causar neumonía. La gripe y el resfrío común son las causas más habituales de neumonía viral en los adultos. El virus sincicial respiratorio es la causa más frecuente de neumonía viral en niños pequeños.
c. Hongos
Hay hongos que pueden causar neumonía, en especial en personas con un sistema inmunológico debilitado.
El síntoma más característico de la neumonía es
• Tos que produce esputo (moco espeso o coloreado)
Otros síntomas habituales de neumonía son:
• Dolor torácico
• Escalofríos
• Fiebre
• Dificultad respiratoria
Sin embargo, estos síntomas pueden variar dependiendo de la extensión de pulmón infectada y del microorganismo que los esté causando.
A veces, las personas que sufren neumonía presentan síntomas digestivos como náuseas, diarrea y pérdida de apetito.
Los síntomas varían aún más en niños y ancianos. A veces el único síntoma es una respiración rápida o un rechazo del alimento de forma repentina.
FUENTE:
Clínica Universidad de Navarra
OMS – Organización Mundial de Salud